Ante la creciente ola de embarazos prematuros y embarazos no deseados, he aquí la solución para evitar este tipo de problemas en adolescentes y jóvenes.
Los embarazos no deseados y las enfermedades de transmisión sexual antes de los 20 años se ha convertido en un grave problema que atenta contra miles de jóvenes. El inicio temprano de la actividad sexual ha provocado que los índices de aborto y embarazos aumenten considerablemente; se trata de una situación delicada que puede atentar contra la propia vida de los adolescentes cuando se toman las decisiones equivocadas.
Es así que sociedades de diferentes países han impulsado una iniciativa para impulsar una educación sexual desde el hogar, consolidando una fuente de confianza y constante comunicación entre padres e hijos, lo que promoverá una concientización de las medidas preventivas que se deben tomar para este tipo de casos.
Por si no lo sabías, un embarazo a destiempo desestabiliza la estructura familiar e impacta considerablemente en la salud de la joven. Todo ello conlleva a una serie de inconvenientes que limitarán la economía de la familia, asumiendo responsabilidades que posiblemente se impondrán ante las aspiraciones de una mejor educación.
Son los padres directos responsables de las acciones que tomen sus hijos mientras sean menores de edad. ¿Cómo entablar una dinámica en la comunicación entre padres e hijos? He aquí el gran reto que deben afrontar los líderes de la familia.