En tiempos donde los tabús ya son historia ¿qué tan importante es la educación sexual en la familia?
Si de niño recibiste una formación disciplinada y estricta, es momento de reconocer que los tiempos han cambiado y se necesita innovar en nuevas vías para tratar un tema tan delicado como la sexualidad. Los medios de comunicación dejan en tapete discusiones de este tipo, y bombardean nuestras mentes con publicidad de doble sentido, sugerente y con fuertes connotaciones sexuales.
Internet es uno de los principales medios para la difusión de pornografía así como un factor negativo que desvirtúa el sentido de una educación sexual consciente y preparada. En medio de esta realidad los padres deben asumir un rol protagónico que haga frente a este tipo de riesgos. El primer paso para llegar a este objetivo es la comunicación.
Temas como relaciones pre-matrimoniales, métodos anticonceptivos y aborto, forman parte de la convivencia diaria de un adolescente que, debido a los medios de comunicación o la presión social de los amigos, se aproxima a un mundo desconocido que está por descubrir sin la supervisión ni el consejo paterno.
Es importante que la educación sexual en la familia se inicie desde muy temprano, evitando huir a las preguntas incómodas y estableciendo un nivel de confianza que permita estrechar el vínculo entre padres e hijos. Para ello, es necesario tener la capacidad para percibir y estar atentos ante un posible cambio inesperado en la actitud y comportamiento de los hijos.